Como el poema épico de los argentinos es una construcción de la propia literatura, sobre todo de los críticos e intelectuales que la utilizaron para refrendar los grandes mitos nacionales. Es un producto de la cultura letrada como el cruce de ésta con la cultura popular del campo argentino. El género gauchesco. A esto se debe agregar que aún se sienten palpitar en el texto los latidos de la injusticia, la desesperación del hombre en una tierra y un momento histórico determinado, y los ecos de su rebelión contra el poder. Encarna de tal modo el alma de un pueblo, que nadie creerá que es la obra de una individualidad.